Pedirán a la Justicia que establezca un límite de 500 metros de las viviendas para la aplicación por vía terrestre de agrotóxicos.
Un grupo de vecinales de la ciudad de Roldán decidieron acudir a la Justicia para frenar las fumigaciones con agroquímicos que padecen muchos barrios desde hace años, una situación que fue denunciada ante el gobierno local sin ningún tipo de respuesta hasta el momento.
La inacción de las autoridades roldanenses y la persistencia en las prácticas indiscriminadas de fumigación en campos linderos a zonas cada vez más pobladas llevaron a los vecinos a iniciar acciones legales a través de la presentación de un amparo ambiental colectivo que será formalizado en un plazo no mayor a los 60 días.
Así lo informaron tanto los abogados que llevarán la causa como los vecinalistas, que además explicaron que durante ese tiempo (los próximos dos meses) habrá una campaña de concientización sobre la problemática de las fumigaciones con la idea de sumar adhesiones de vecinos al amparo.
El recurso, que se presentará ante Tribunales rosarinos, buscará establecer un límite de al menos 500 metros para las fumigaciones terrestres, y de 3.000 metros para las aspersiones aéreas.
Todo eso se discutió el fin de semana pasado en una concurrida reunión de vecinos realizada en una de las plazas del barrio abierto Las Tardes, ubicada a pocos metros de un campo cuyo propietario —según afirmó Nito Longo, uno de los organizadores— «no deja de fumigar periódicamente sin cumplimiento de ninguna norma».
En la reunión se recordó que las denuncias sobre las fumigaciones indiscriminadas que padecen esos barrios comenzaron en enero de 2015, a lo que siguió el rechazo al diálogo por parte del Concejo Municipal de esa ciudad y la negativa a atender el tema por parte del Ejecutivo roldanense, enumeró Longo.
Hace pocas semanas, todos los diputados provinciales que componen la comisión de Medio Ambiente de la Legislatura santafesina estuvieron en Roldán reunidos con los representantes de las 11 vecinales y habitantes de esos barrios, tras lo cual el diputado Carlos del Frade presentó un pedido de informes ante esa Cámara.
Tras esa serie de encuentros y ante la falta total de respuesta por parte del gobierno local los vecinos decidieron avanzar con un amparo colectivo, medida que impulsará el grupo de abogados Causa.
Estrategia legal
Según explicó Lautaro Gieco, uno de los letrados patrocinantes, la idea es sumar voluntades de todo Roldán ya que entienden que «todos los barrios están afectados por este problema».
Para eso van a trabajar con principios constitucionales y normas del derecho internacional que protegen el medioambiente como un derecho humano, y puntualmente irán contra una ordenanza municipal de Roldán que permite fumigar a partir de los 100 metros del límite con la ciudad, algo que entienden va contra jurisprudencia que ya existe que estipula límites más amplios.
«La ordenanza se basa en una ley provincial bastante ambigua que da la potestad a los municipios de fijar esos límites, pero hay evidencia de que 100 metros son absolutamente insuficientes», señaló.
En base a estos argumentos, el amparo pedirá un límite de al menos 500 metros para fumigaciones terrestres, y de 3.000 metros para aspersiones aéreas: «Ese es nuestro piso, lo mínimo que exigiremos», concluyó Gieco.
Peajes
Otro actor social que se considera perjudicado por las fumigaciones indiscriminadas son los trabajadores de los peajes, en muchos casos expuestos al tener que trabajar en rutas que atraviesan zonas rurales.
Por eso desde el Sutravi (Sindicato de Trabajadores Viales) pidieron una reunión con Cesar Mackler, secretario de Medio Ambiente, a quien le expresaron la preocupación de quienes trabajan en cabinas en su mayoría situadas en zonas rurales.
Desde el gremio indicaron que la provincia se comprometió a trabajar con el Comité Interministerial de Salud Ambiental a nivel legislativo para impulsar una norma que declare «zona libre de fumigación» las áreas donde se emplacen las cabinas.
