Un día 8, pero de 1977 el régimen Genocida sufrido en nuestro país sustrajo, entre miles de otras, la vida de una docente de nuestra localidad, aquella madrugada del 8 de febrero las fuerzas la sacaron de forma abrupta, de su domicilio, la fusilaron con más de cincuenta balazos y la arrojaron en una banquina cercana al cementerio de Armstrong. Fanny Giordano había quedado cesante en los cargos que poseía, en diciembre del año anterior, debido a su concepción de la educación inspirado en el pensamiento socialista latinoamericano, admiradora de Salvador Allende y sus reformas educativas. Sin tener participación gremial, ni política (motivos generales a la hora de –arrestar por averiguación de antecedentes-) fue elegida por la -gravísima conducta- de indignarse y reaccionar ante las injusticias que provocaba la exclusión y la desigualdad en la educación. Hoy en la evocación de los 44 años de este acto de violencia irracional, ilícita e injustificable, queremos recordarte y homenajear tu nombre. Y que cada cañadense tenga presente tu imagen y la de todos aquellos que padecieron hechos aberrantes de esta magnitud. ¡Ni olvido ni perdón! ¡Fanny Giordano presente ahora y siempre! Asociación de Derechos Humanos CDG
La pintura de Fanny es del artista y militante por los DDHH.