La diabetes es una enfermedad crónica que implica la modificación de estilos de vida, una alimentación adecuada, ejercicio físico y en ocasiones la utilización de fármacos. Para su tratamiento es fundamental que las personas aprendan a manejarla de forma correcta con el objetivo de lograr una buena calidad de vida y evitar posibles complicaciones.
Melina Sassaroli, licenciada en nutrición, explicó “El cuidado de la alimentación es una parte fundamental del control de la diabetes y contribuye a retrasar o evitar la aparición de complicaciones. El cuidado de la alimentación forma una parte del tratamiento, por lo tanto, no se puede hablar de tipos de alimentos y cantidades, sin hablar también de la actividad física que se realiza, los medicamentos que se toman, o si padece o no otras enfermedades como colesterol o hipertensión. La alimentación de la persona con diabetes es similar a la de cualquier persona: deben repartirse los alimentos a lo largo del día, es decir, realizar entre 3 a 5 tomas según características personales y pauta de tratamiento (desayuno, media mañana, comida, merienda y cena), evitando comidas con una alta cantidad de hidratos de carbono o bien que sean de absorción rápida, ya que elevan la glucosa de forma considerable”, indicó de manera introductoria la profesional.
En relación a los alimentos que una persona con diabetes debe evitar o disminuir en su consumo, Sassaroli señaló: “Se deben evitar los azúcares, gaseosas, fiambres, golosinas y lácteos enteros. Atender el consumo de harinas refinadas reemplazándolas por integrales. Es importante disminuir las carnes rojas y los chacinados. Es oportuno aclarar que las gaseosas, por más que sean dietéticas, se deben evitar en exceso, como también el exceso de edulcorantes artificiales, jarabe de maíz de alta fructosa, glutamato monosódico. Evitar también las bebidas e infusiones que exciten al sistema nervioso, como café, té, mate y guaraná; y evitar hidratos de carbonos procesados, por ejemplo, purés instantáneos”.
Sobre los alimentos que se deben preferir para atender la alimentación en relación a la diabetes, la licenciada en nutrición explicó que “las semillas son importantes incluirlas en las comidas, una cucharadita (las de chía y lino aportan omega 3). Los frutos secos (nueces, almendras, avellanas) ricos en grasas insaturadas, incorporarlas en ensaladas o combinarlas con frutas frescas para colaciones, o simplemente consumir un puñado acompañado de una infusión.
Elegir los cereales en su versión integral (arroz integral, fideos integrales, pan integral, etc.). Si consumen refinados (arroz, fideos blancos) se pueden combinarlos con fibra (hortalizas crudas o cocidas con cáscara) y proteínas, como por ejemplo carnes, huevos y/o queso en la misma comida, de esta forma la absorción será paulatina”, concluyó MelinaSassaroli