Campeones en Santa Rosa de Calamuchita.
Hace unos días, el equipo de maxibasquet de nuestra ciudad emprendió viaje hacia la bella ciudad de la provincia de Córdoba para enfrentar un torneo triangular organizado por el anfitrión deportivo italiano.
El director técnico Miguel Angel Bellino que volvía a dirigir luego de su operación de cadera, tenía que administrar bien los cambios porque el equipo chancho es largo y son pocos los minutos que cuenta para repartir entre tanto plantel. Otro inconveniente a tener en cuenta eran las ausencias de sus externos: Alvaro «chirolita» Civriatti, Claudio «olfato» Rovira, Diego «blackzila» Robba, los cuales no pudieron concurrir al evento, y en un equipo donde predominan los jugadores de talla, era a priori un inconveniente. Pero no todo eran malas noticias: los chanchos recuperaron a dos de sus mejores jugadores, Damián «el chaqueño Palavecino» Castillo, y Fernando «el dotor» Rodríguez, este último que se incorporaba después de su breve paso por adeo de cañada de Gómez y quién no pudo continuar en «el portavion» por problemas de horario y cuestiones laborales.
El partido del viernes ante el local fue un partido completamente distinto al paisaje. El bello estadio sito sobre la cima de una sierra, fue testigo de un partido tosco. El equipo italiano planteó un partido inteligente. De posesiones muy largas y de mucho contacto físico. A veces haciendo abuso del mismo. En el equipo chancho, Fabricio «yo no juego» Alfei respondía a los golpes yendo hacia abajo del aro con penetraciones constantes, y sin bien no siempre podía llegar a destino, era como decir «no les tengo miedo» y querer contagiar al resto del equipo. «El chaqueño» Damián corría cada vez que podía, (encesto varias bandejas) pero se le hacía difícil definir cómo en otros torneos. «El dotor» era un mohicano abajo del aro y principal arma ofensiva, pero el juego rudo del local complicaba la claridad de las jugadas. Martin «es simple» Celiz intentaba asistir y hacer jugar a todos sus compañeros, pero se hacía difícil. Charlie «topadora roja» Zacnun jugaba a la guerra dejando hasta la última gota de oxígeno, pero le costaba la definición. Pompi «el estreñido» Bonetto no anduvo fino con el tiro de tres pero no renunciaba un solo minuto de intensidad. Sergio «mister básquet» Bellino entraba y daba una enorme mano abajo del aro reboteando. Roberto «viejito» Cartabia, en su nuevo rol de capitán se lo veía muy fuerte y recuperado de las lesiones que lo hicieron renegar en el último tiempo, pero al igual que el resto del equipo no podía desequilibrar en el tanteador. Marcelo «el juvenil» Passacantando nos regalaba algún que otro lindo tiro de su quinta pero el equipo local también aplicaba rigor contrarrestando cualquier intento de desequilibrio. Silvio «Camilo Sexto» Maurelli no perdía un balón en su rol de base, pero no lograba sacar los contragolpes. Partido muy duro el cual se pudo definir con la fórmula Rodríguez, Celiz debajo del aro y los contragolpes de Castillo y Alfei. Victoria chancha más que ajustada.
El sábado los chanchos debían enfrentar al equipo de embalse. Combinado que era un enigma, pero que antes de enfrentar a los chanchos no habían tenido inconvenientes al doblegar al equipo de italiano, al cual venció por más de 20 puntos. Y la victoria no fue de mera suerte. El equipo cordobes era un equipo parejo. Con un goleador sobresaliente y resto del equipo con excelente condición física. A eso se le sumaba que se lo notaba trabajado. Jugadas de salida de fondo, sistemas, rotación de balón. El equipo de embalse no andaba con chiquitas.
El primer cuarto de la final fue muy intenso. En el equipo local «el dotor» era imparable, haciendo 12 de los 14 puntos del equipo. El equipo cordobes jugaba con mucha intensidad y cada vez que los chanchos sacaban una pequeña diferencia, lo daba vuelta. Así terminó el primer periodo con una victoria de 16 a 14 de embalse. El segundo periodo, el DT Miguel Angel Bellino, quien se encontraba cocinando el asado para recibir al plantel post partido, había dejado claro algo: vaya como vaya el partido en el segundo periodo entran Maurelli y Cartabia. Y vaya decisión. ¡Dos ingresos descollantes! Silvio Maurelli entro y dejo atónitos a propios y extraños con triple a la brasilera, y un doble en «jump shot» que hizo recordar al celebre jugador Pichi Campana. El Capitán cartabia no quería irse sin levantar la copa, y encestó dos tiros incómodos que en un partido de tanta presión, eran aire puro. Pero como ya dijimos, embalse era muy buen equipo y lograba dar vuelta el tanteador.
El equipo chancho tenía una ventaja: experiencia. El equipo local de maxibasquet no es un equipo que a la vista sea de temer, pero no por nada es un equipo «multicampeon» y que desde hace 7 años no para de superar escollos. Y así fue otra vez:
Si bien los chanchos llegaron a perder hasta por 7 puntos aprovecharon cada una de sus virtudes:
Alfei y Castillo corrían. Celiz era una máquina de asistir a Rodriguez debajo del aro. Maurelli y Cartabia sorprendían con su magia. Passacantando era una daga desde su quinta. Y Pompi Bonetto no renunciaba aún errando. Los chanchos definían el partido en los últimos dos minutos y escribían otra página de sus historia de títulos.
En palabras extraídas de charla teléfonica con el capitán Cartabia
«Una emoción que no se puede explicar. Cuando parece que nos quedamos sin NAFTA parece que nuestra amistad llena el surtidor y nos da energía para seguir. Déjame agradecer al equipo de italiano que fueron maravillosos anfitriones y nos brindaron una atención espectacular, y también a los chicos de embalse que nos felicitaron post triunfo. ¿Y que decir de los chanchos? Me sobra cualquier palabra que no sean las de ‘»somos un hermosa familia»
A los chanchos les gusta el rosa!