La crisis de la industria de la madera en Cañada de Gómez se acrecentó en 2018 y ya se encuentra en una situación límite. Unas 120 empresas emplean a unos 3.000 trabajadores en esa ciudad ubicada a 75 kilómetros de Rosario y la mayoría entró en un proceso preventivo de crisis, según informó el secretario de Producción de la Municipalidad cañadense, Marcelo Cogno, quien reveló que las ventas bajaron un 40% durante 2018.
“Estamos cada vez peor. Si esto sigue así de acá a fin de año habrá despidos y cierre de fábricas”, dijo Cogno a El Ciudadano. Y remarcó que lo único que evitó que haya despidos masivos es “el compromiso social de las empresas y su diálogo con el sindicato y la municipalidad”.
De los 120 emprendimientos madereros que tiene Cañada de Gómez, dos son grandes empresas –Jorge Richezze S.A. y Eldo Omar Mosconi S.R.L–, de las más importantes del país. El resto son pymes a las que se les dificulta afrontar sus obligaciones con la cadena de pagos cortada y la imposibilidad de acceder a un crédito por la condena a la quiebra que representan las altas tasas de interés.
En el comienzo de la gestión de Cambiemos, fue la llegada de muebles importados lo que afectó a la industria cañadense. Ahora, esa problemática quedó soslayada por la brutal caída del mercado interno. “Casi el 100% de lo que se fabrica acá es para mercado interno. Desde marzo no se vende casi nada. En 2018 las ventas cayeron un 40%”, enumeró Cogno, quien advirtió que los importados ya dejaron de ser el gran problema, ya que “nadie está comprando nada”. En 2016 las ventas ya habían caído un 30% respecto de 2015 y en 2017 otro 35%.
Después del neoliberalismo de los 90 y la crisis de 2001, quedaron sólo 30 emprendimientos madereros en Cañada de Gómez, de los 2.500 que había. La recuperación económica que se dio a partir de 2002 permitió a la capital del departamento Iriondo recuperar parte del entramado productivo, con una fuerte inversión del sector empresario.
El bienestar tuvo su derrame en toda la ciudad. Algo que, según Cogno, empezó a terminar. “Se ve mucho menos movimiento y a la gente no le alcanza para pagar impuestos municipales, por lo que la Municipalidad recauda menos”, señaló el funcionario de la gestión de la intendenta justicialista Stella Maris Clerici.
Mundo cerrado
Las industrias cañadenses fabrican muebles en serie que se destinan al mercado interno prácticamente en su totalidad. Las últimas declaraciones del presidente Mauricio Macri proponiendo a las empresas argentinas “exportar más” no son acompañadas de medidas que fomenten esta práctica y los competidores internacionales manejan niveles de producción difíciles de igualar.
Una fábrica de 200 trabajadores en la Argentina es considerada grande; la misma empresa en Brasil es un emprendimiento chico. Lo que se produce aquí en una semana, en Brasil se hace en un día. Además, existe un monopolio fabril, por lo que se abaratan los costos.
Ni siquiera la caída del salario, la reducción de cargas patronales y un tipo de cambio aparentemente competitivo ayudaron. “El mundo está cuidando su mercado interno. Esto se logra subiendo el poder adquisitivo de los trabajadores, no bajándolo. Porque si quisiéramos exportar, no podemos competir con Brasil o China”, comparó Cogno.
Créditos con gusto a poco
Pese a las medidas económicas, el gobierno al menos hizo acto de presencia en Cañada de Gómez en septiembre pasado y anunció una línea de créditos que, según los empresarios, todavía no lograron reactivar la actividad.
Fue el ministro de Producción y Trabajo de la Nación, Dante Sica, quien lanzó la primera mesa de madera y muebles junto a cámaras empresarias y sindicatos de todo el país.
“El sector de madera y muebles representa una gran oportunidad para el desarrollo de la industria argentina, con creación de valor, empleos de calidad y un enorme potencial tanto para el mercado interno como externo”, dijo en ese momento el funcionario macrista.
En ese contexto, el Banco Nación anunció una línea de créditos para la compra de muebles nacionales en 25 cuotas fijas con tasa de interés bonificada, con el objetivo de que el alicaído consumo se reactive un poco.
Además de Sica, participaron del lanzamiento la ministra de Producción de Santa Fe, Alicia Ciciliani, el secretario de Industria de Córdoba, Pablo de Chiara, y el ministro de Producción de Buenos Aires, Javier Tizado, y el presidente de la Federación Argentina de la Industria de Madera y Muebles (Faima), Pedro Reyna.
El Ciudadano Web.